domingo, 19 de diciembre de 2010

Galimatías viajero

Por el pais de los manteles de cuadros
salpicados de eses sibilantes,
giros trazados al azar de lluvias de colores
conformando bucles y arabescos
en los que caer atrapado
luna tras luna.
Incapaz de sumergirme en el estanque del sueño
reproduzco un guión escrito sobre sábanas blancas
y me adentro en el barrio de tortuosas calles
entre casas de blanca cal.


jueves, 16 de diciembre de 2010

5. Final

Descansa ahora, relajado. Date la tregua que vas buscando. Porque llegó el compás que marca tu paso, abonado un peaje que ya queda atrás. Y el hambre voraz, de lobo estepario, o la angustia vital de sentirse asfixiado, te observan ya desde el otro rincón.

Y es que no es fácil beber de palabras de otros, cuando malvives ahogado en tus propios silencios. Sientes, padeces, ríes y lloras; pero tu voz muda te niega la luz, el color, la razón. Te quedas su alma, les robas la voz. Para tener la tuya, y saberte. Y con sus palabras, ajenas, te armas, y te desarmas. Hasta el próximo asalto.